"Todo iba bien en los tiempos de la subvención de la entonces poderosa Unión Soviética. Otorgaban al gobierno isleño cinco mil millones de dólares anualmente. ¡Claro, chico! Ahora ya no es así. Se acabó la felicidad, chico. Se acabó el paraíso también. Desde la caída del Muro de Berlín y la caída de la Cortina de Hierro. ¡Se acabó el sueño comunista! ¡Se acabó el socialismo! ¡Se acabó!"
"¡Qué logros sociales ni que nada! Vea usted mismo. ¿Es de seres humanos venir así en el camello? Si no somos borregos o vacas, señor. La pestilencia no se aguanta. ¡Dan ganas de vomitar! ¡Y con este calor! ¡Pa que nos dé rabia, chico! ¡Ya tú ves los logros de la Revolución! ¡Ayúdenos, señor, allá afuera!, corea una joven. ¡Que esto se conozca en todo el mundo! Que venga la ayuda internacional de los países verdaderamente democráticos y libres. Por Dios señor, que llevamos una vida de perros."
"¡Imposible salir del país! ¡Pero a dónde van, chicos! ¡Si aquí tienen todo! Comida segura, trabajo seguro, escuelas seguras, hospitales seguros. ¡Un futuro seguro por amor a la Revolución! Afirman los defensores del sistema. Sí, claro, contestan los opositores, anónimos, silenciosos, la mayoría de habitantes: ¡Un futuro seguro de esclavitud! ¡Vivimos arrodillados, señor, con la bota militar sobre la nuca! ¡Somos unos perros amaestrados!"
"No desean que la inconformidad debida palpablemente a una injusticia de discriminación racial se extienda a otras regiones de provincia. ¡Sea la mecha que encienda la Revolución contra la Revolución! ¡Ni lo mande San Fidelio! Vaya a llegar este escándalo a los inmaculados oídos del comandante supremo Cástulo. ¡El inicio de una insurrección!"
"¡Por qué nosotro siempre apalte! ¡Toda la vida! ¡Jodel! ¡Como neglos leploso! ¡Lejo de lo blanco y de lo moleno y de lo amalillo! ¡Ya cállate, coño! ¡Tú está loca! Ella se ve beoda. ¿Qué pasa, chico? ¡Dale, dale! Reta Magurabomba con la cara levantada."
"Mire usted a su alrededor: todo mundo prostituyéndose a cambio de unos dólares. ¡Que convertidos en pesos isleños rinden mucho! Y, bueno, necesitamos sobrevivir."
"La historia del hombre moderno se detuvo en este país hace cincuenta años."
AUTOR: Juan Carlos González Alarcón De sangre guerrerense, nacido en Tixtla, el escritor mexicano Juan Carlos González Alarcón estudió la Licenciatura en Periodismo en la Escuela Carlos Septién García de la ciudad de México.
EDITORIAL: Mandala Ediciones
ISBN: 9788416316144 / EAN: 9788416316144 /
REF: 9788416316144